Anclas y Anclajes

Quienes ya conocen PNL y las disciplinas complementarias, que en su conjunto conforman un arsenal de Herramientas y Técnicas, permiten al Deportista optimizar su Rendimiento Deportivo de un modo mensurable.

     Cuando la persona se inicia en el Aprendizaje de esta Tecnología, manifiesta variadas reacciones, de un individuo a otro. Muchos se sorprenden con su eficacia, otros observan con suspicacia y otros tantos consideran haber descubierto la “Quinta Disciplina”. Pues bien, cualquiera de aquellos comentarios no están muy lejos de lo que realmente ofrecen las Metodologías asociadas a PNL.

    A modo de ejemplo podemos mencionar el proceso de “Anclaje”. (Este proceso es parecido a lo descubierto por Pavlov y la salivación del perro, al escuchar un timbre, pero no es lo mismo). Cuando se hace necesario potenciar el desempeño de un Atleta, por las razones que fueren, la instalación de “Anclas” (como estímulo), para activar determinados Recursos que habrán de optimizar el rendimiento del Deportista, requiere todo un Procedimiento a seguir. Por lo general, mientras el Atleta aprende a aplicarlas por sí mismo, es conveniente que reciba la ayuda de alguien que ya posea la experiencia necesaria. Siguiendo ciertos pasos el Deportista relata a su asesor/a qué es lo que desea mejorar o modificar (desde una perspectiva deportiva, claro está). Si, por ejemplo, el individuo manifiesta interés en mejorar o incrementar su auto-confianza, especialmente en los momentos que se encuentra en Competición, el/la Facilitador/a inducirá en el Deportista lo necesario para que recuerde determinados “Momentos Cumbre” que hayan acaecido durante la trayectoria deportiva del Atleta sin que importe si puede recordarlo con lujo de detalles, aunque sería ideal que pudiese hacerlo. A continuación ha de ser guiado para que, por cada Momento Cumbre, el Deportista pueda revivir aquella situación (siempre con la ayuda de la persona que le esté ayudando).

   En ocasiones se puede dar el caso que la persona tenga consciencia de un determinado recuerdo, pero, haya olvidado ciertos detalles; en tales casos si el/la Facilitador/a es un profesional experimentado/a podrá emplear una de las Técnicas más antiguas de PNL que permite que la persona sólo se valga de su subconsciente para que el “Ancla” a instalar surta el efecto deseado.

    Seguidamente, el/la Facilitador/a, una vez instaladas todas las “Anclas” necesarias, pondrá a prueba cada una de ellas. Este procedimiento tiene por finalidad comprobar que el proceso de Anclaje se ha realizado correctamente. En algunas ocasiones el Deportista puede que presente determinadas dificultades que impidan u obstaculicen la instalación de un “Ancla”. Cuando se producen eventualidades de este tipo existen Técnicas específicas que, de la mano de un/a buen/a Facilitador/a, es factible superar el o los inconvenientes en poco tiempo. 

     Por último el Deportista, con la colaboración de su asesor/a, se proyectará en el tiempo situándose en el futuro; la idea es que pueda “Visualizar” o imaginar cómo será el momento en que se encuentre en su próxima competición, haciendo uso de las Anclas instaladas. Es relativamente fácil darse cuenta si la persona responderá de la manera programada. ¿Cómo? Por medio de su Lenguaje Corporal. Muchas personas desconocen el hecho de que, una persona revela más información por medio de su fisiología que a través de las palabras que emite. Por lo tanto, aun cuando el Atleta no responda verbalmente sus gestos, tonalidad de la voz, accesos oculares, etcétera, serán suficientes para que alguien familiarizado con PNL sepa que todo funcionará bien, en el Deportista, de acuerdo a lo esperado.