Niveles Neurológicos

    Este Nivel es el que representa el lugar o ambiente en que se desenvuelven los integrantes de una Institución Deportiva. También aquí se emplea la expresión “Contexto” para especificar dónde, cuándo y con quién estaría sucediendo determinada actividad o tarea.

    Es en este Nivel dónde el Director Técnico, por ejemplo, ha de definir e informar dónde, exactamente, se realizará uno o más eventos; momento (hora) de la contingencia; si hubiese algún tipo de limitaciones o dificultades es aquí donde el Cuerpo Técnico ha de dar a conocerlo a sus integrantes. Forman parte de un Entorno las instalaciones, oficinas, gimnasios, canchas, Etc. No hay que olvidar que el tipo de instalaciones y/o la calidad de éstas pueden influir en el desempeño del deportista.

    Desde la perspectiva de un ascenso a una Montaña, el Entorno estaría definido por la elección del monte que se va a escalar; las condiciones climáticas, los elementos que deben llevar cada uno de los integrantes de la expedición, si entre cada “Campamento” (Nivel Lógico) dispondrán o no, de cargadores (humanos y/o animales), como es el caso de aquellas jornadas de montañismo en el “Himalaya”, donde se pueden utilizar ambas posibilidades, lo cual facilita la excursión, en los primeros tramos.

    En el Nivel inmediatamente superior podemos estudiar las actuaciones específicas de cada participante. También, de ser necesario, se podría analizar el Comportamiento de toda la agrupación de personas que formen parte del Equipo. En este Nivel resultan importantes no sólo los actos de disciplina de cada integrante; también es relevante considerar de qué modo se comunican, entre sí, todos los participantes. No obstante, hay algo que muchas veces no se tiene en cuenta: la “Comunicación” consigo mismo que puede realizar toda persona. Por ejemplo, si un individuo mantiene un dialogo interno, en donde se dice a sí mismo, cosas como: “No me siento seguro”, “Debí haberme quedado en casa”, “Voy a ser el primero”, Etc. Obviamente, tales pensamientos tendrán cierto grado de influencia a en la persona.

    Visto desde el punto de vista del Montañista, todo dependerá de qué tanta experiencia posea el escalador. El Comportamiento puede variar, de un deportista a otro, si se trata de un novato o de un experto. Y, en lo que se refiere a Conducta propiamente tal, existen anécdotas que dicen que los expertos son más avezados y que algunos novatos en ocasiones se arriesgan innecesariamente. En cualquier caso el “ojo avizor” del Director Técnico, de la expedición, estará atento al Comportamiento de cada integrante.

    Es común que cuando se va a emprender determinado proyecto (por ejemplo, de emprender una nueva empresa), los organizadores seleccionen un grupo de personas que puedan sumarse al nuevo desafío. En tal caso, una de las principales atenciones se ha de focalizar en las Habilidades, Capacidades y Competencias de cada potencial colaborador.

   Cabe mencionar que se debe distinguir entre el Rol que pretenda asignar a un individuo y las Capacidades que éste tenga, como para ser elegido. Alguien podría ser llamado a ejecutar el Rol de “Fiscalizador” y algo muy diferente es que sus principales habilidades sean, “Locuacidad” y “don de mando”.

    El Responsable de una expedición al Everest, probablemente tendrá mucho interés en saber cuáles son las Capacidades y Habilidades que posea cada integrante de la jornada. Aquellos más experimentados es posible que se sientan más capaces que quienes llevan poco tiempo en tales prácticas. Sin embargo, también es importante que alguno tenga sea hábil cocinando; otro que sea capaz de elaborar mapas en breve tiempo, Etc. Y, a su vez, todos los integrantes del equipo querrán conocer el currículo de quién será su guía; ¿Es hábil en la montaña?, ¿cuántos años de experiencia tiene?, ¿han habido pérdidas de vidas bajo su cargo?, son preguntas que, probablemente, la mayoría se hará.

    Un aspecto relevante, que el responsable de la expedición posiblemente tendrá presente son las Habilidades y Estrategias cognitivas de quienes tendrá bajo su responsabilidad. La capacidad de memorizar cuando se les de ciertas instrucciones, qué estrategias posee a la hora de tomar decisiones, Competencias de Creatividad para resolver situaciones de emergencia, Etc. Todo lo anterior también es influyente en el desempeño del individuo.

     Tal vez ya te hayas dado cuenta que, a medida que se va subiendo de un Nivel a otro, el grado de complejidad también va en ascenso. El caso de lo que encontramos en el Nivel de las “Creencias”. También es conocido como “Sistemas de Creencias porque en este mismo Nivel se agrupan cuatro importantes elementos, determinantes en el Rendimiento y Desempeño del individuo. Además de las “Creencias” (que a su vez se categorizan en “Opiniones”, “Creencias” y “Convicciones”), encontramos en este Nivel los “Valores Esenciales”, “Criterios” y un cuarto que hemos denominado (para hacerlo más fácil de comprender) como “Programas residentes”. Todos ellos contribuyen en la “Motivación” que experimente la persona ante algún importante desafío (Por supuesto, en el “Entorno” en que se encuentre). Es en este Nivel donde pueden quedar reveladas las razones (por qué) al individuo se comporta como lo hace en ciertos lugares; Para el Cuerpo Técnico y especialmente para un Entrenador se constituyen como piezas importantes los “Valores” de cada Deportista. ¿La razón? Son determinantes a la hora de Motivar a una persona. Un Deportista puede que tenga fe (creencia) en su cometido y desarrolle un buen trabajo; pero, ¿será eso lo que espera de él su Director Técnico o es un Rendimiento de Excelencia lo deseable? Si un individuo tiene como su principal Valor a la Familia, prometerle un montón de dinero no le será tan motivador como asegurarle que su familia siempre estará protegida (gane o pierda la competencia deportiva). Pero, ¿cómo se enteraría el Entrenador si el Valor del Deportista ha quedado satisfecho? Para comprobarlo existen los “Criterios”. Tú, yo y cualquier persona manifestaríamos diversos criterios para corroborar que  nuestro Valor más importante se ha satisfecho. Ante la pregunta, ¿cómo lo sabes? Alguien puede que conteste: “Veré a todos los integrantes de mi familia felices”; otro quizás responda: “Lo sabré cuando me entere que todos gozan de buena salud” y, un tercero a lo mejor nos dice: “Sé que mi familia es feliz cuando viajan”. Como se puede apreciar todos albergan variadas razones (Criterios) para definir como satisfecho determinado Valor.

Respecto de los “Programas residentes”, por tratarse de uno de los más importantes elementos del Sistema de Creencias y por su extensión al tratarlos, uno a uno, los comentaremos en otro lugar y en otro momento.

    Si el Nivel de las “Creencias” se perfila como uno de los más relevantes en el Modelo de los Niveles Lógicos, el de “Identidad” lo es mucho más. Es el Sistema de Creencias, en su conjunto, que dan soporte a la Identidad de una persona. Cuando escuchamos a alguien mencionar “La Misión que tengo en mi lugar de trabajo es…” nos revela el sentido que otorga a su propia Visión de formar parte del Sistema al que pertenece. (Un fanático de “Colocolo” se siente orgulloso de pertenecer a su Club favorito y lo revela diciendo “Soy Colocolino”). Cualquier persona que se “Identifica” con algo o con alguien, lo manifiesta con frases como: “Soy…”, “Yo soy…”, Etc. Los problemas surgen cuando un individuo se identifica erróneamente, con algo que supone correcto. Por ejemplo, que una persona diga: “Soy estúpido porque no soy capaz de clavar una madera” estaría confundiendo la carencia de una Habilidad (Nivel de Capacidades) con un Nivel muy superior: el Nivel de “Identidad”. 

      Superando todos los anteriores Niveles el último de ellos corresponde al Nivel “Espiritual”. Si en el peldaño de las Creencias encontramos relevante lo que guarda relación con el conjunto de elementos que aquí residen, el de Identidad puede que parezca superior a los demás; no obstante, esto no es así. El que define el “Propósito” del individuo, para realizar todo lo que hace en su vida es, precisamente, el Nivel Espiritual conectado estrechamente con el sentir de la persona con lo que está más allá del ser humano; el Ente Superior o Sistema en que se encuentra inserto.

    Todo aquello en lo que el Deportista cree; lo que más lo motiva, hacia quién o a qué dirige sus actuaciones, cómo o con qué se Identifica, Etc., se basa en la percepción que la persona tiene de aquello que trasciende a la figura humana: el Propósito por el cual se esfuerza cada día, persevera una y otra vez, priorizando lo que considera más importante de su existencia. Cada individuo posee un particular Propósito al hacer lo que hace y sería muy difícil que cambie de opinión.